Review de Motorstorm Artic Edge (PSP)

Sigo recordando las reviews que he hice en Metodologic, después de dos retroreviews, el tercer artículo que hice fué un análisis de uno de los juegos de PSP más divertidos que he podido jugar: Motorstorm Artic Edge. Podéis ver el artículo original en este enlace.

De: bigBIG Studios (desarrolladores de Pursuit Force)
Nos lo trae: Sony
Género: Conducción extrema
Localización: Localizado al castellano

¡A toda pastilla!

Recientemente, el catálogo de PSP se ha visto ampliado con una serie de títulos de una calidad excelente: Gran Turismo PSP, Soul Calibur: Broken Destiny, Final Fantasy Dissidia y el juego que nos ocupa, Motorstorm Artic Edge, el cual pertenece a la franquicia exitosa de Motorstorm que empezara en PlayStation 3 como título de lanzamiento.

La franquicia Motorstorm es una creación de Evolution Studios, convirtiéndose rápidamente en uno de los buques insignia exclusivos de PS3. Este estudio (compuesto por viejos componentes de Psygnosis y de Digital Image Design), que realizara en PlayStation 2 la serie de juegos World Rally Championship, consiguiendo con Motorstorm y su secuela (Pacific Rift) su legión de seguidores gracias a una jugabilidad directa, veloz y muy, muy divertida, alejándose del concepto de simulación al volante que imperaba en WCR. El primer título nos situaba en unos entornos desérticos, mientras que el segundo nos metía de lleno en exóticos paisajes tropicales.

Debido a este éxito, la aparición de un Motorstorm en PSP era el paso lógico, por lo que se le otorgó a bigBIG (estudio satélite de Evolution) quién creara la versión portátil. Una vez más, saltamos de escenario, alejándonos de las carreras en desiertos y ambientes tropicales para adentrarnos en glaciares, tundras y las montañas más extremas que pueda haber en el mundo. Todo esto sin perder ni un ápice del estilo particular de la franquicia.

Al filo del Ártico

Gráficamente luce de forma espectacular. En cada una de las pistas que nos ofrecen nos vemos inmersos en toda la grandiosidad del paisaje polar, llegándonos incluso a transmitir una sensación de lo más gélida. Por lo que respecta al resto de los elementos clásicos de la franquicia (como las rampas, las cerradísimas curvas, los saltos imposibles…), todo se mantienen en su línea. Igualmente, se os ofrece la posibilidad de llegar a la meta escogiendo distintas rutas mientras conducimos, dependiendo esta decisión del vehículo que escojamos al inicio. Que por cierto, de estos hay una gran selección: camiones, coches, motos, motos de nieve, 4x4… afortunadamente representados de forma fiel a como son en realidad, con su coherencia (y exagerada) física a altas velocidades.

Otro de los aspectos interesantes es la cantidad de opciones que tenemos disponibles, empezando por un clásico modo de campeonatos llamado “Festival”, donde iremos desbloqueando campeonatos, vehículos y distintos elementos en base a la clasificación que vayamos obteniendo. Están los clásicos modos de contrarreloj, partida libre y multijugador agrupados en el modo “Diversión Violenta”. Y un modo “Garaje” donde podremos personalizar nuestros vehículos, consultar las estadísticas y varias opciones más. Mención especial al “Modo Foto”, que nos permite hacer capturas del gameplay tal y como ocurriera en las versiones PlayStation 3.

Respecto a la mecánica del juego, la idea es bien sencilla: ir a toda velocidad sin soltar el acelerador y usando el turbo para avanzar posiciones. Pero hay que tener cuidado con esto último: si se abusa, el vehículo acabará explotando. Tampoco nos libraremos de los accidentes, ya que si vamos muy rápidos en una curva y nos chocamos contra una pared o nos caemos por un precipicio, veremos cómo nuestro transporte queda completamente destrozado. Hay que pensar bien qué ruta seguiremos en cada carrera, ya que no nos conviene ir por una parte sin nieve con una moto preparada especialmente para ese terreno, por ejemplo.

Y ojo, si ya en solitario tenemos, como hemos visto, muchas opciones disponibles que alargan considerablemente la vida del juego, la existencia de la opción ad hoc y online que nos ofrecen partidas multijugador hacen de Motorstorm Artic Edge un juego con muchos visos de ser eterno. Así que ya sabéis… a pulsar el botón del turbo para ganar todas las carreras en el Ártico, mientras os espero con mi vehículo a través de la red de redes.

Ante tanto espectáculo visual y maniobras imposibles a toda velocidad, el aspecto sonoro del programa pierde importancia. Sin embargo, tenemos una buena variedad de pistas musicales de estilo rock que son muy apropiadas al ritmo frenético de las carreras. También se nos da la posibilidad de usar nuestras propias pistas musicales en MP3, por si no estamos conformes con la oferta que hay.

Conclusión

Evidentemente no nos vamos a encontrar un espectáculo visual como los Motorstorm de PS3, pero vaya si Artic Edge se queda cerca. Y es que bigBIG ha conseguido aprovechar al máximo las capacidades de la portátil de Sony ofreciéndonos una experiencia impactante a la altura de los otros títulos de la franquicia. Por eso y por sus ingentes dosis de directa diversión hacen de este lanzamiento uno de los juegos más recomendables del catálogo actual de PSP.

Saludos a todos!