miércoles, 9 de noviembre de 2016

Everybody's gone to the Rapture - Crítica

Generalmente, los juegos que son experiencias narrativas e interactivas no suelen gustarme demasiado. Son juegos donde se da mucha prioridad al argumento y no a la jugabilidad. Aún asi, si enfocamamos la experiencia a básicamente una historia interactiva y nos sumergimos en las tramas, puede resultar bastante interesante. Everybody's gone to the Rapture de Chinese Room entra de lleno en esta categoría y nos presenta un contexto interesante lleno de misterios para descubrir.


El juego nos sitúa en el pueblo ficticio de Yaughton, Inglaterra en plena década de los 80. Algo terrible y misterioso ha ocurrido porque el pueblo esta completamente vacío, no hay gente y lo único que ha quedado son sus cosas y unos ecos de luz misteriosos esperando ser descubiertos por nosotros y asi poder averiguar que es lo que ha pasado exactamente. El pueblo de Yaugthon se divide en 5 zonas principales, cada una de ellas centrada en un personaje distinto y su arco argumental particular, aunque al final todas estas tramas quedan unificadas por la historia principal. Curiosamente el título del juego spoilea bastante sobre el suceso que ha ocurrido en el pueblo, pero básicamente lo interesante es ir montando todas las piezas del puzzle a medidad que vamos observado los sucesos que ocurrieron en el pueblo antes del incidente.