La semana pasada estuve hablando de Final Fantasy XII, la última entrega de la saga para PS2. Hoy toca la última entrega de este recopilatorio, de momento, y hablaré del último juego de la saga FF hasta el momento: Final Fantasy XIII. ¿Cumple con los aspectos fundamentales y clásicos de la saga? Veamos que nos ofrece 13ª entrega de FF!
Final Fantasy XIII fué lanzado en nuestras tierras en marzo del 2010 y siendo el primer juego de la antología Fabula Nova Crystallis
aunque como siempre en Japón salió un poco antes, en diciembre del
2009. Originalmente este juego fué planeado para PS2, pero obviamente
con la salida de FFXII en esta consola en casi fin del ciclo de su vida,
se optó por derivar el proyecto a PS3. Anunciado en el E3 de 2006,
FFXIII tiene la característica de ser el primer FF de la línea oficial
de entregas en salir multiplataforma en dos consolas de sobremesa,
cuando normalmente se asocia FF con alguna compañia en particular,
primero Nintendo y después Sony. Ya desde los primeros tráilers se pudo
apreciar que FFXIII se centraría mucho más en la espectacularidad de las
escenas y batallas.
Como en otros FF, uno de los pilares más importantes es el argumento y en ese aspecto, FFXIII no defrauda, tiene una historia compleja
que nos ofrece muchos giros y revelaciones. El contexto argumental nos
sitúa en Coocon, un mundo flotante encima del planeta Pulse, donde
dominan los fal'cie y vigilan de forma extrema que ninguno de sus
ciudadanos se ponga en contacto con elementos de Pulse. Digamos que esto
último no se pudo evitar y entonces comienza la denominada purga que
consiste en enviar a toda una serie de ciudadanos hacia Pulse. Con este
punto de partida es cuando empezamos a llevar a Lightning, nuestra
protagonista, que intenta deseperadamente rescatar a su hermana Serah.
Otros personajes se unirán al grupo por sus propias motivaciones, Sazh
Katzroy quiere rescatar a su hijo; Snow intenta también
rescatar a su novia que resulta ser Serah y Vanille junto a Hope
intentarán perseguir a Snow por no haber podido proteger a la madre del
chaval. Podría alargarme más, pero simplemente diré que las cosas, como
buen FF que es, no salen exactamente como lo habían planeado los
personajes y todo se acabará complicando. Hasta el punto de que el
equipo de personajes en numerosas ocasiones se dividirá en grupos más
pequeños, en un estilo que me recuerda a FFVI.
FFXIII tiene una serie de personajes que cumplen a la perfección lo de
encontrarse con roles típicos en este tipo de historias: la
protagonista, Lightning, es la clásica mujer valiente, fuerte, realista y
tirando a pesimista que sin embargo claramente coge el liderazgo del
grupo. Sazh es el personaje que aporta la comedia dentro de lo que se
puede con su carácter y sobretodo por la cría de chocobo que vive en su
pelo afro. Snow es el típico personaje chulo, fuerte, pero que en el
fondo es un buenazo y aparte ofrece el contraste a Lightning. Vanille es
la chica joven, muy inocente y con poco sentido común que probablemente
o nos encantará u odiaremos. Hope es el chaval novato, el típico
personaje que al principio resulta un poco llorón (aunque dado su
contexto personal es comprensible) pero que va madurando a lo largo de
historia, como los demás personajes. Más adelante en el juego se une
otro personaje llamado Fang, una mujer que cumple el modelo de personaje
misterioso que tiene un peso importante en el argumento.
Argumentalmente ya vemos que FFXIII tiene todos los ingredientes para
ofrecernos una historia interesante. Pero todos sabemos que con eso solamente
no se puede hacer un FF. Gráficamente el juego es una obra de arte,
puro CG en movimiento. Es impresionante, desde luego está claro que S-E
se ha querido centrar sobretodo en este punto. Los modelados de
personajes son geniales, Las caras, los ojos, el pelo, etc. Y no es solo
que se vea impresionante en las CGs, el propio motor del juego ya es
estupendo. Los escenarios, mapeados y especialmente Pulse están muy bien
recreados también, pero como los caminos son poco complejos (tema del
cuál un poco más adelante hablaré) no se acaba de apreciar en toda su
plenitud. Puedo decir lo mismo de los modelados de los enemigos, aunque
con menor importancia.
El sistema de combate de FFXIII es bastante interesante y resulta una combinación de sistemas de batalla de anteriores FF. Por un lado no hay combates aleatorios sino que simplemente nos encontramos el monstruo en el mapeado y comienza la batalla; una vez entablado el combate usaremos un sistema que recuerda al ATB pero que no es exactemente igual. En vez de esperar que una barra de turno se llene, disponemos de una barra de acción en la cuál situaremos una serie de acciones que consumen secciones de esa barra: a mayor complejidad y fuerza de la acción, más bloques consume y si consumimos toda la barra, tendremos que esperar que se recargue. Solo podemos controlar al líder del equipo, pero gracias al sistema Paradigm Shift podemos cambiar la estrategia en combate (pasar de acciones de curar a un asalto total, por ejemplo). Siendo sincero, el sistema de combate está muy bien, lo que no me parece tan bien es que después de cada combate los HP del equipo se restauren. Esto es debido a la ausencia de MP para la magia, ya que simplemente consume bloques del ATB.
Los personajes tampoco obtienen EXP, simplemente consiguen unos puntos que pueden cambiar por aumentos en los atributos y distintas habilidades/magia en un tablero de muy similar al de esferas de FFX. Tampoco ganamos dinero después de los combates, para conseguir guiles tendremos que obtenerlos de los cofres o vendiendo items, que en esta entrega adquieren una importancia muy grande para potenciar armas y en los cristales que sirven para guardar la partida y hacen las veces de tienda. Porque los comercios y hostales brillan por su ausencia en este juego. En mi opinión, todo está hecho así para que los jugadores nos centremos al 100% en los combates sin preocuparnos demasiado por lo demás. Controlando el sistema de batalla por bloques de ATB, podemos llegar a encadenar numerosos ataques que producen muchísimo más daño. Todo lo que hagamos en el combate nos reportará un rango al final de este que nos indicará que nivel hemos tenido en la batalla.
Las invocaciones regresan en FFXIII y como en el X y el XII tienen un peso importante en la batalla al poder llevarlos y no solo lanzar su ataque final. Aparte de ayudarnos con sus ataques y habilidades como si se tratáran de transformers, entran en el llamado Modo Gestalt y se transforman en un vehículo que el invocador podrá llevar. Cada personaje tiene su invocación particular y se desbloquea a lo largo de la historia. Todas las invocaciones tienen un aspecto futurista y considero que se han pasado un poco con el toque moderno a las invocaciones, que puedo decir... Prefiero un aspecto más clásico.
asta este punto he estado comentado varios aspectos del juego. Se puede apreciar que en todos los sentidos estamos ante un FF típico con sus aspectos particulares como cada entrega. Sin embargo también tiene un par de puntos que no me acaban de gustar: el primero de ellos son los escenarios y su navegación; considero que una de las cosas importantes de un RPG como FF es que las mazmorras tengan cierto diseño complejo, que te puedas perder o simplemente explorar. Que haya también un mapamundi que aunque nos dé una sensación ilusoria de libertad nos ofrezca un vasto terreno. Cuando llegamos a Pulse es lo más parecido a un mapamundi que veremos, pero que nadie se espera visitar ciudades en un estilo de los otros FF. El otro defecto que le veo son las pocas misiones secundarias y minijuegos que hay, que esto ya entrará según los gustos de cada uno, pero yo considero que un FF debe tener estos elementos. Por suerte, FFXIII dispone de una quest secundaria que como en FFXII consiste en cazar unos monstruos determinados bastante poderosos. En cualquier caso lo peor de este juego es la sensación de simplificación que se ha hecho.
Escuchemos la música de FFXIII:
Como siempre, estamos ante una gran BSO, un elemento ya clásico de los
FF y que desde luego en esta entrega no es una excepción. Aunque se echan
de menos algunos temas clásicos como el Victory Fanfare, que lo han cambiado...
En resumen, FFXIII es un buen juego pero como Final Fantasy creo que no cumple. Se han simplificado demasiadas cosas en la 13ª entrega y personalmente espero que este no sea el camino que seguirá FF en el futuro. Como siempre el tiempo nos dará la respuesta. En fin, este recopilatorio de momento ha quedado completado aunque en el futuro ya iré añadiendo nuevas reseñas de esta saga puesto que me han quedado en el tintero bastantes juegos que no son de la línea principal. Pero la semana que viene toca empezar un nuevo recopilatorio que va como anillo al dedo en las fechas que estamos actualmente...
Saludos a todos!
Estupendo análisis, me gustaria que me dijeras que versión jugaste y si sabes si hay alguna diferencia entre la version de PS3 y XBOX360?¿.
ResponderEliminarNo lo he probado, aunque he leido tus impresiones y comparto que a mi me gustan luegos con libertad y no pasilleros, luego el tema de las misiones secuhndarias es una pena que se quiten es lo que hace que tengan gracias estos juegos. Luego el tema de si es pasillero es otro tema que me ´´inquieta´´
Saludos y perdón por el tocho.
@IGRuiz:
ResponderEliminarLa mejor versión para mi de FF XIII es la de PS3. Aparte de estar todo el juego en un solo disco, se ve ligeramente mejor que en la 360.
La verdad es que espero que la saga FF no siga el camino del FF XIII.
Saludos!